post-title Vida https://elfaroastorgano.com/wp-content/uploads/2021/06/MAR-CO-A.-MACIA.png 2022-03-11 18:32:29 yes no Publicado por Categorías: Opinión

Marco A. Macía – Pasando el puerto

Éramos felices y no lo sabíamos. Se destilaba la vida por el alambique de lo previsible con la seguridad de que muy poco podía alterarnos. Recuerdo que hasta podíamos rematar la semana cualquier tarde del domingo friendo una docena de churros en una sartén rellena hasta el borde de aceite de girasol, que era de la barata y casaba mejor que ninguna con la masa estrellada. Podíamos vestir camiseta en diciembre y dejar, emborrachados de locura, que el termostato girara sin tope. No había freno para emprender cualquier viaje, por lejano que fuera, por el entretenimiento de llegar, tomar un café y regresar. El placer estaba en el ir y en el venir, en el deambular distraído para probar un itinerario diferente por aquella carretera que es más larga pero más bonita. Empapados de nuestras rutinas cotidianas pasaba la vida sin mascarillas y sin miedos a un posible bombardeos, a inflación desbocada y a recibos incontrolados. Así era la vida de hace tan sólo dos años, de hace dos días. De antes de que se estrenara esta trilogía que, si no se remedia, se va a convertir en serial de sobremesa, de esas con más capítulos que personajes. Bien es cierto que el tiempo actúa como un bálsamo que lima los bordes ariscos y torna en bueno lo que parecía malo. Porque hace dos años, hace dos días, también teníamos graves problemas, desgobierno, amenazas inmigratorias, extremistas con el bolígrafo de firmar leyes y cuotas impagadas de un sistema resquebrajado. Pero eso se olvida. En cambio el vértigo miedoso por lo que quizá puedan prohibirme nos paraliza ahora y nos convierte de nuevo en pasivos contempladores de la vida. Esa que sigue pasando ante nuestros ojos.

MARCO A. MACIA