“Frenar la desigualdad está en tus manos” es el lema de la Campaña Contra el Hambre de Manos Unidas en este 2023 que acabamos de arrancar. Como explica el Obispo de Astorga, Jesús Fernández, en su carta a los diocesanos con motivo de esta campaña -con la que comienza un quinquenio en el que la Asociación de la Iglesia Católica en España para la ayuda, promoción y desarrollo de los países más desfavorecidos se centrará en algunas de las brechas de desigualdad que siguen creciendo y comprometen la dignidad de todo ser humano, las cifras de la pobreza y el hambre han aumentado hasta el punto de que más de 811 millones de personas pasan hambre en el mundo. “Aunque los datos son fríos no nos pueden dejar indiferentes ya que en el mundo mueren de hambre entre cinco y once personas por minuto”, apunta Monseñor Fernández.
El prelado asturicense incide en que para “lograr un mundo justo, inclusivo, sostenible y en paz se hace necesario educar para el desarrollo a través de la información y formación sobre las causas estructurales de la pobreza y el hambre y se nos propone apoyar proyectos de desarrollo de las economías familiares, la formación profesional, el fortalecimiento de las comunidades o el empoderamiento de las mujeres”. En este sentido, Jesús Fernández aprovecha para agradecer a Manos Unidas su trabajo, un agradecimiento que hace extensivo “a todos aquellos que colaboráis con esta organización católica en su maravillosa y encomiable tarea”.
Este año, Manos Unidas de Astorga tratará de financiar dos proyectos en África valorados en 91.896 euros, para los que esperan la solidaridad y el apoyo de los diocesanos. Uno de ellos será en Costa de Marfil (49.500 euros y una duración de 12 meses) para la mejora de la calidad de vida en el Foyer Akwaba, un centro regentado por los Hermanos de La Salle que abrió sus puertas en 1999 y que cuenta, por un lado, con un hogar para niños de la calle, de entre 7 y 17 años con capacidad para acoger a unos 55-60 niños, además de una escuela primaria para estos niños con capacidad para 160 alumnos a la que acuden además de los internos del centro, niños y niñas del barrio cuyas familias hayan sido identificadas y se haya comprobado que carecen de recursos.
En este espacio, los Hermanos de La Salle han solicitado la colaboración de Manos Unidas para la rehabilitación y equipamiento de la cocina y el comedor del centro. La contraparte realizará una aportación económica al proyecto que representa el 9% del total y Manos Unidas colabora con el 91% restante. Este proyecto beneficiará a 75 niños: 60 internos, más 15 del barrio con necesidad de apoyo alimentario e indirectamente a los 160 niños y niñas que acuden a la escuela primaria, a los 20 aprendices y 60 mujeres de media que acuden a alfabetización por las noches, además de a los educadores y monitores del centro, así como a todo el barrio y se cuantifica en al menos 2.000 personas por año.
El otro proyecto que tratará de impulsar Manos Unidas de Astorga es en Zambia, en concreto para garantizar el acceso al agua potable en la zona rural de Mbwindi (42.396 euros). El Obispado de Chipata ha solicitado la colaboración de Manos Unidas para perforar y poner en funcionamiento diez pozos en terrenos comunitarios de la zona rural de Mdwind que contarán con bombas manuales. Los beneficiarios directos serán las comunidades cercanas a los nuevos pozos (8.500 personas) y se estiman en 700 los beneficiarios indirectos. El proyecto tendrá una duración de 12 meses y Manos Unidas aportará el 81% del coste para cubrir los gastos de perforación, las bombas de los pozos y gasolina mientras que los beneficiarios aportarán los terrenos, los materiales y el trabajo para construir las vallas de protección de los pozos y los costes de manutención y estancia de los equipos de perforación (9%) y el socio local correrá con el riesgo de perforación de pozos secos y los costes de administración del proyecto (10%).