Enrique Ramos – Piedra de Afilar
Algunos medios de la capital titulaban este fin de semana que «los trenes podrán por fin pasar hacia Asturias por León sin retroceder» ¿Solo a Asturias?. Los que siguen hacia el resto de la provincia ¿sí tendrán que retroceder? ¿O es que por ser pocos los convoyes que continúan circulando, los viajeros que siguen hacia Astorga y Ponferrada van a tener un trato diferente?. Ese es el concepto de centrismo de la nada que se critica de Madrid y Valladolid, pero que la fina capital de la vasta (y a menudo basta) provincia exhibe sin pudor en cuanto baja la guardia. Y con ella algún leonesista no capitalino haciendo de tonto útil en favor de ese Leviatán que acaba en Trobajo y que a falta de ideas propias, vampiriza al resto de la provincia.