Con los datos que llegan de China, en una situación de repunte pandémico, pero con el gigante asiático renunciando a su intento de política de COVID cero, los datos del coronavirus en la provincia y en el conjunto de la comunidad cierran el año invitando a un optimismo cauteloso.
La inmunidad adquirida de modo natural o a fuerza de vacunas ha hecho que en la comarca prácticamente no haya incidencia de coronavirus en la última semana, pero se vuelve a recelar de las reuniones familiares y de concen traciones como las de Fin de Año o Reyes que pueden provocar repuntes en una pandemia que sigue sin estar plenamente controlada, aunque se ha conseguido cronificar conviviendo con ella.
El año acaba con un COVID controlado pero mirando de reojo a la apertura de China
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