
Fuerte repunte en Astorga 1 que neutraliza el buen dato del miércoles y arrastra al alza también a la zona 2
Con el sistema sanitario en situación de colapso técnico, al enfrentar la pandemia de manera crítica por lustros de recortes, el coronavirus avanza desbocado por toda Castilla y León. La situación es tan seria que el vicepresidente de la Junta anunció que, independientemente del criterio que saliera de la reunión del Consejo Interterritorial de Sanidad, cuyas conclusiones se conocerían después del cierre de esta edición, pedirá al Gobierno que autorice medidas jurídicas que habiliten la solicitud del toque de queda en la comunidad autónoma.
La nueva medida supone otra exigencia de sacrificio a la vida cotidiana y, a veces, a la manera de ganarse la vida de muchos ciudadanos, mientras la sanidad sigue descosiéndose incapaz de dar respuesta a la pandemia.
Astorga, de hecho, volvió a registrar una lectura intradiaria desastrosa: los buenos datos del miércoles, que parecían anunciar que la curva se doblegaba fueron un espejismo: los 58 casos computados en los últimos catorce días en la zona básica de salud Astorga 1, suponen volver a tasas de 440 contagios por cien mil, igual que al principio de la semana.
Y aunque las otras zonas de la comarca ofrecen un perfil mejor, estabilizadas o en ligero descenso, el repunte de Astorga 1 ha arrastrado a Astorga 2: en los municipios del área rural de Cepeda y Maragatería se computaban para los últimos catorce días un total de 24 casos, lo que supone 464 por cien mil, una incidencia relativa nunca vista en esta pandemia en esta zona. Así las cosas, es previsible que el Gobierno, dado que lo prometió, autorice el toque de queda en horarios nocturnos, al menos a Castilla y León y otras comunidades que lo han pedido, para evitar concentraciones fuera de la hostelería y sus horarios, que parece ser uno de los grandes focos de expansión del virus.